27 de febrero de 2009

Mini Recomendaciones

Hoy cambio un poco el formato usual de mis entradas para ofrecerles dos películas simples, de las que no tengo mucho que contar.

Estos dos filmes, The Band’s Visit y 12:08 East of Bucharest, son lo que yo clasificaría como textos humorísticos. Hago la distinción entre humor y comedia porque no creo que ninguna de éstas los haga morirse de la risa. Ambas sacan el humor de situaciones tensas e incómodas y se apoyan en el diálogo y las actuaciones de sus artistas para lograr su objetivo.

Ambas premisas son muy simples, casi minimalistas. En el caso de The Band’s Visit, la historia se basa en un simple malentendido: un centro cultural en Israel invita a una orquesta de policías egipcios a tocar en una ceremonia. Cuando la orquesta llega al aeropuerto, toman la guagua (bus) equivocada y terminan en otro pueblo. Y ya. El desarrollo de la película se da dentro de esa situación incómoda de un grupo de egipcios en un pueblo israelí que no conocen.

12:08 East of Bucharest es igualmente simple: un presentador de un programa local quiere hacer un episodio dedicado a averiguar si su pueblo formó parte o no de la revolución en contra del dictador Nicolae Ceauşescu y utiliza a un viejo senil y a un profesor borrachón como invitados. Esta película es tan simple, en términos narrativos, que más de la mitad del filme se da dentro del set tercermundista del programa.

Pero no dejen que la simpleza de estas historias les engañe. Estas películas se pueden dar el lujo de ser así porque detrás de esos libretos existe un caudal de historia contextual que casi habla por sí solo. No hay que ser un historiador para conocer las hostilidades que existen entre Israel y el mundo árabe. De igual forma, no hay que tener un doctorado en política para entender que las revoluciones y los golpes de estado son materia sensitiva para muchas personas.

En ambos casos, los libretistas han sabido explotar esas historias para crear diálogos inteligentes, chisposos, tensos y humorísticos. Por demás, ambas películas están llenas de pequeños detalles que nos toman por sorpresa y humanizan, más aún, las experiencias. En fin, saquen estas películas sólo cuando se sientan en el ánimo correcto. Son cortas pero de paso lento y, cómo se infiere de sus premisas, no tienen mucha acción.

Título: Bikur Ha-Tizmoret (The Band's Visit en inglés) - 2007
Países: Israel, Francia y Estados Unidos
Idiomas: hebreo (subtítulos en inglés)
Género: humor
Dónde se consigue: Netflix





Título: A fost sau n-a fost? (12:08 East of Bucharest en inglés) - 2006
País: Rumanía
Idiomas: rumano (subtítulos en español e inglés)
Género: humor
Dónde se consigue: Netflix




Perdonen las inconsistencias de formato de esta entrada. Blogger esta mas terco que una mula hoy.

17 de febrero de 2009

Joven juega en television, lo acusan de hacer trampa


Título: Slumdog Millionaire - (2008)
País: Reino Unido
Idiomas: inglés e hindi
Género: drama
Ocasión: Cuando quieres ver una película poderosa
Dónde se consigue: Está en los cines ahora mismo

Resumen

Un joven participa del programa Who wants to be a millionaire? (versión de la India) y está a punto de ganar todo el dinero cuando lo acusan de hacer trampa.

Reseña

Aquell@s que me leen con regularidad (aunque hace tiempo que no escribo con regularidad) sabrán que no soy dado a recomendar películas extranjeras que son demasiado famosas. Parte del propósito de este blog es dar a conocer buenas películas extranjeras que, por una u otra razón, no se conocen mucho en esta parte del mundo. Sin embargo, después de ver Slumdog Millionaire decidí que tenía que hacer una excepción.

Por razones personales no he estado viendo mucho cine recientemente. En parte por eso he dejado de escribir; no tengo muchas recomendaciones nuevas. Pero ayer hice un aparte y, dejándome llevar por las recomendaciones de mi familia, fui a ver este filme británico. Slumdog Millionaire me recordó, una vez más, por que prefiero el cine internacional e independiente al cine hollywoodense.

Lo primero que me llamo la atención de este largometraje fue la estructura narrativa que utiliza. Mezclando tres tiempos distintos (el pasado pasado, el pasado reciente y el presente) Slumdog Millionaire logra mantener la atención de uno desde la primera escena de tortura hasta el tradicional baile bollywoodense que se da mientras ruedan los créditos. El manejo del tiempo, por demás, está tan bien hecho que uno no se confunde con las tres historias que corren paralelas hasta unirse al final.

La escenificación cruda de la vida en los arrabales de la India es uno de los aciertos más grandes de Slumdog. No es excesivamente gráfica, pero no tiene que serlo para presentarnos la pobreza, la miseria y sus distintas consecuencias. Por un lado hace un gran trabajo al enseñarnos la dureza de la vida de las personas que viven en este mundo, pero por otro nos muestra la inventiva, el instinto de supervivencia y la habilidad humana para aguantar dolor.

Tengo que decir que es una película que brilla en casi todos los aspectos: las actuaciones, la cinematografía, la escenografía, la música, etc. La colaboración de dos directores de backgrounds y nacionalidades distintas (Danny Boyle - UK - Loveleen Tandan* - India) se nota en la elección cautelosa de todos estos elementos. Es una fusión maravillosa.

Hay algo, sin embargo, que me incomoda un poco de la premisa básica de la película. La construcción de la historia parecería decir dos cosas con las que no estoy de acuerdo: 1) que la voluntad individual puede por encima de todas las estructuras de poder y 2) que, en el fondo, el mercado es la salvación. En cuanto a lo primero, el debate entre las estructuras y la agencia del ser humano, creo que existe una necesidad humana de decirnos a nosotros/as mismos/as que no somos irrelevantes, que tenemos poder y que podemos cambiar las situaciones. Y aunque lo veo como un sentimiento noble y esperanzador, pienso que a veces pecamos de sobresimplificar las situaciones. A mí me parece que es indiscutible que existen estructuras que impiden el desarrollo de miles de millones de seres humanos. Jamás y nunca me podrán convencer de que la gente es "pobre por que quiere" y de que todo se arreglaría con un poquito de "positive thinking". Pero bueno, esto es otra entrada para otro blog =)

En cuanto a lo segundo, creo que el mercado, representado claramente por el show "Who wants to be a millionaire?" aparece en esta película como escape y salvación. La primera función, la de escape, se muestra cuando vemos como el país se paraliza cada vez que viene el show. De hecho, en un momento dado la misma Latika se lo menciona a Jamal. Y son escenas dignas de un libro de la primera generación de la escuela de Frankfurt: todo el mundo olvidándose de su dolor y pobreza por media hora en lo que la televisión los teletransporta a un mundo mágico de dinero y placer. No creo que tenga que mencionar como se muestra el show como salvación. Lo problemático de esto es que en ningún momento se explica que el capital ha jugado una gran parte en la miseria de estas personas. De hecho, la mirada de la película está tan reducida que parecería que esas condiciones las causan ell@s mism@s. Anyways, la verdad es que esto es una inclinación ideológica y no le resta ningun mérito al proyecto artístico per se.

Admito no haber visto todas las películas que están nominadas al Oscar este año, sin embargo, si me dejo llevar por la “frontrunner”, The Curious Case of Benjamin Button, tengo que decir que Slumdog es la que debería ganar. Pero, como me imagino que ustedes saben, el Oscar es un premio que ha ido perdiendo toda credibilidad poco a poco. Después de todo, esta es la misma Academia que le otorgo 13 nominaciones a Titanic, que nominó a Jerry Maguire como mejor película del año, que le robó el oscar a La Vita e Bella de mejor película (no extranjera), etc. Así que si Slumdog Millionaire no gana, no me sorprenderá; al fin y al cabo, no se deben esperar peras del olmo.


* Cabe mencionar que a Loveleen Tandan no la nominaron al Oscar mientras que al co-director Danny Boyle sí. La Academia, tan chula, se escuda detrás de una regla anticuada que dice que solo una persona puede quedar nominada para el premio de mejor dirección. Loveleen Tandan hubiera sido la primera mujer no-blanca nominada al premio. Y eso que según los conservadores estadounidenses Hollywood es la tierra santa de los liberales. =)

(Update: Slumdog sí ganó el Oscar y Danny Boyle ganó el Oscar como mejor director. Enhorabuena! Sin embargo, el Sr. Boyle ni siquiera mencionó a Loveleen Tandan, a quien consideró tan importante en el proceso de hacer la película que le dio el título de co-directora. Después de haber leído varias versiones, parece que el proyecto original era de Boyle y quizá por eso es que sólo le dieron la nominación a él. No obstante, hay mucha política envuelta en esto. Aquí les dejo un enlace con una perspectiva feminista, muy interesante e importante, del asunto.)